Microsoft adquiere toda la división de hardware de Nokia por una cifra total de 5.440 millones de euros. La operación (pendiente aún de la aprobación por parte de los reguladores estatales y accionistas), permitirá a Microsoft fabricar él mismo terminales móviles, seguramente potenciando la exitosa gama Lumia, primer éxito de la colaboración entre Microsoft y Nokia previa a la compra.
Microsoft gana el control de toda la gama de smartphones que tenía Nokia (transferirá a MS todo lo relacionado a su división de smartphones Lumia y de terminales Asha, que supone más del 80% de todos los terminales con Windows Phone) y la incorpora a su división de devices. La compañía ya ha adelantado que no dejará de licenciar Windows Phone a terceros. Simplemente ahora, también fabricará sus propios terminales.
En lo que respecta a Nokia, este deja de ser fabricante de móviles para concentrarse en el ámbito de las comunicaciones corporativas, y por tanto sujeta a los vaivenes de este mercado. Su futuro, por tanto, no parece comprometido al concentrarse en este negocio, deshaciéndose de la división de móviles.
Los retos para Microsoft
La compañía de Redmond tiene importantes incertidumbres a las que hacer frente, que van a suponer un reto al que la compañía deberá responder:
a) Tomar el control del negocio de dispositivos, integrándolo en sus estrategias a todos los niveles; b) integrar los procesos de comercialización y productivos de fabricación de dispositivos en una empresa diseñada para fabricar software (dejando de lado Surface y xBox). Es decir, conseguir algo similar a lo conseguido por Apple; c) gestionar las relaciones con el resto de fabricantes que actualmente están apostando por el sistema móvil de Microsoft (el 20% de los Windows Phone) (como se lo tomarán si en Redmond dirigen sus mejores mimos sólo a su terminal?)
Las oportunidades
Evidentemente, el movimiento de Microsoft le sitúa en un mercado de gran volumen y le permitirá impulsar directamente su presencia y cuota en tablets y smartphones, intentando frenar el hasta ahora impresionante liderazgo de Android, y muy especialmente de Samsung.
Impulsar directamente la innovacion en dispositivos, capitalizando además esas innovaciones en la marca Microsoft. En este sentido, podemos presenciar un impulso a Surface y la aparición de , nuevos Lumia.
Microsoft sigue teniendo un activo que no tienen ni Google ni Apple y es su segmento empresarial de soluciones con una base instalada envidiable. Hay una oportunidad de extender la integración una oficina movil en el entorno profesional que todavía está bastante inmadura.
En mercados emergentes Nokia es un player destacado con terminales Low Cost. Microsoft tiene la capacidad para aprovechar esta oportunidad potenciando modelos y SO de bajo coste (como parece que Apple ya está haciendo con su iPhone de “plástico”).
Autor: José Luís Pérez, Analyst Director Penteo